Chau Mario

Te conoci a la mitad de una tregua, en el momento justo de un cafe
tratando de encontrarme en la biografia que hace uno de si mismo, fui tendiendo puentes, creando andamios entre tus letras y el lado oscuro de mi corazon coraza
Segui la huella de tus paginas por montevideo, camine buenos aires en busca de tu ultimo respiro, y hoy me entero en el filo de un cafe de la noticia abismal de tu muerte
Y hoy se a ciencia cierta, no con esa ciencia que dice que dos mas dos es cuatro y que los cuerpos se atraen con la misma fuerza y pasion con la que un dia llegaran a repelerse, no, hoy digo que se a ciencia cierta, con esa ciencia que nace en el corazon al leer tus lineas que entre usted y yo maestro siempre habra y existira un trato, asi no digo chau numero tres, si no mas bien digo chau numero uno...
chau maestro benedetti.

Allí

El lo sabia, que todos los dias no eran iguales, que las manos no siempre acarician de la misma manera, que los relojes nunca dan la misma hora, que la eternidad no dura mas que unos cuantos días y que las palabras las arrastra el olvido..
El lo suponia que los miedos siempre corren tras de uno, que los fantasmas siempre rondan en las noches, que no se puede tocar el cielo con las manos...
El se busco con un poco de razón, se encontró en tres palabras bien pronunciadas, lleno sus bolsillos de despedidas y decidió no mirar lo perdido,
El lo sabia que allí, ese lugar en donde uno a veces quiere detener los días, allí nunca hubo nada por ganar.